En muchas ocasiones, a la aprobación de tu currículum vitae por parte de los reclutadores y la entrevista personal, se suma un obstáculo más en el proceso de selección de personal de las empresas: la dinámica de grupo. Se trata de una cita en la que te verás cara a cara con el resto de candidatos para participar en procesos de interacción en los que se pondrán a prueba tanto tus habilidades prácticas como tus aptitudes personales. Es decir, una convocatoria donde te analizarán desde la perspectiva profesional y también socioemocional.

A continuación te damos los tips que necesitas para destacar en esta clase de procesos de selección:

1. Prepárate para jugar

Lo primero que debes tener en cuenta es que esta clase de procesos de selección son, básicamente, un juego. Tu rol debe ser, ni más ni menos, el que mejor se identifique con tu personalidad: ¿eres más de llevar de observar y analizar o de llevar el liderazgo? Recuerda que, como siempre, la mejor faceta de nosotros, somos nosotros mismos.

Cuando te toque expresarte, muestra tus capacidades de comunicación de la mejor manera. Ten en cuenta que los candidatos que expresan con fluidez sus ideas siempre son bienvenidos en una empresa.

Sé proactivo, positivo y, recuerda, no hay una solución única. . De hecho, en ciertos escenarios, no se pretende que la encuentres, sino ver cómo intentas llegar a ella y cómo te relacionas con los demás candidatos trabajando en equipo.

2. No te olvides de que estás en una entrevista de trabajo (colectiva)

Algunos candidatos se sienten poco presionados ante estas dinámicas porque no las consideran una entrevista de trabajo. Nada más lejos de la realidad. Si bien es cierto que se trata de una fase preliminar a la entrevista final, el profesional a cargo de la selección tratará de conseguir datos relevantes sobre todos los participantes.

Por ello, aunque debes de mostrar un semblante natural y relajado, ten en cuenta que tus respuestas y los datos que aportes durante el proceso serán incorporados a tu perfil, por lo que conviene que te tomes muy en serio la experiencia.

Estas son algunas de las capacidades que se suelen estudiar en las dinámicas de trabajo:

  • Capacidad para liderar a otras personas.
  • Autonomía en el desarrollo de opiniones.
  • Gestión emocional del riesgo.
  • El desempeño dentro de un equipo
  • Empatía con el resto de candidatos

3. Toma notas durante la dinámica

Apuntar la información más relevante mientras desarrollas la dinámica con tus compañeros te permitirá contar con un soporte adicional durante la exposición que se suele hacer al completar la sesión. Además, esto te permitirá mostrar que tienes capacidad de aprendizaje​​​​​​​ y que te interesa “estar donde estás”.

Consejo: una breve y buena exposición (basada en puntos clave y conclusiones debidamente fundamentados) te permitirá destacar sobre los demás durante el broche final.

Es importante que, a lo largo de la exposición tengas en cuenta, a mayores de la información relevante que explique las áreas en las que habéis trabajado, datos de tus compañeros:

desde su nombre hasta su cualificación u opinión sobre un determinado tema... Todo aquello que demuestre que has estado integrado en el grupo y no actuado de manera individual, ¡también sumará puntos!

Consejo: si hablar en público no es tu fuerte, empápate de consejos sobre ello: practica delante de un espejo y estate muy seguro de ti mismo, ¡lo harás bien!

4. Sé respetuoso con los demás candidatos

Aunque el propósito de una dinámica de grupo, desde el punto de vista del candidato, es destacar sobre los demás, la deportividad, empatía e incluso la conciliación son básicas y deseable dentro de un equipo de trabajo. Que no te pueda la presión: lo primero es el respeto por el trabajo de los demás. . Demuestra que eres un candidato que aportará un buen ambiente laboral, ayudará a sus compañeros y, en definitiva, es apto para el trabajo en equipo.

En una dinámica basada en el debate, por ejemplo, esto es especialmente importante. Ser categórico no te servirá de nada. Por el contrario, la pluralidad y la defensa lógica de tus argumentos ​​​​​​​son dos cualidades que tu discurso debería aportar.

5. Algunos ejemplos de dinámicas grupales

Conocer algunas dinámicas te ayudará a comprender mejor su funcionamiento y te permitirá estar preparado en caso de que te toque una de las siguientes alternativas. A continuación te explicamos algunos ejemplos:

Juegos de rol

Dentro de la categoría de juegos de rol, puedes encontrarte con muchas tramas. Cada una de ellas está diseñada para descubrir los talentos y puntos débiles de los participantes.

Una opción muy recurrente consiste en repartir personajes con papeles encontrados entre ellos, por ejemplo: se plantea la construcción de un centro comercial en una reserva natural. Se reparten los roles (promotor del proyecto inmobiliario, concejal de urbanismo, consumidor habitual del centro, el ecologista, etc.). Sean cuales sean los intereses de tu personaje, tendrás que defenderlos frente a los demás actores del argumento.

Con esta dinámica, los reclutadores pueden analizar, entre otras cosas, tu construcción y exposición de argumentos así como la solidez de los mismos, o habilidades como la comprensión ante otras posturas.

Solución grupal a un problema

Las ficciones destinadas a buscar una solución grupal a un problema están muy vistas, pero su efectividad está fuera de toda duda.

“La NASA”, por ejemplo, es una dinámica en la que se plantea un escenario similar al siguiente: aterrizas en la luna junto con tu equipo y descubrís que la nave está dañada. No queda otra que desplazarse 300 km hasta la base más cercana. Tienes una lista con 15 objetos seleccionados estratégicamente. Tu misión es listarlos en orden de importancia, del 1 al 15, primero por tu cuenta y luego con el resto del equipo.

El objetivo es, sobre todo, analizar habilidades relacionadas con la toma de decisiones.

El mejor comunicador

Otra modalidad, aunque menos frecuente, es “el molino”, una dinámica pensada para descubrir al mejor comunicador. Al llegar a la sesión, recibes un mensaje en un papel que, después, tendrás que transmitir, sin ayuda de las palabras, al resto.

Ahora es el momento de practicar estas dinámicas, toma nota de las capacidades que van a examinar y sácales brillo. Incluso puedes practicar estas dinámicas en casa con amigos y familiares, ​​​​​​​¡puede ser un plan divertido!

Y recuerda: si pasas a la siguiente fase del proceso de selección, sé coherente con tu actitud en la dinámica. De nada vale actuar con el papel de líder si después esa no es tu mejor cualidad, sé natural y, ¡mucha suerte!