Existen momentos en la vida en los que necesitamos más dinero del que tenemos: para comprar un coche, para comprar una casa o para invertir en un negocio. Sin embargo, ¿de verdad necesitas un crédito? ¿crees que estás preparado para asumir los pagos? ¿sabes cómo encontrar el banco adecuado para tus necesidades?

En este artículo te damos una pauta sencilla para decidir cuándo y cómo pedir un préstamo al banco.

Cuándo pedir un préstamo bancario

Normalmente los préstamos o créditos bancarios se solicitan cuando es necesario hacer frente a un importante desembolso de dinero. Es decir, cuando reunir esa cantidad de dinero nos llevaría más tiempo del que queremos asumir. Un ejemplo muy claro es la vivienda: no podemos estar 30 años ahorrando para comprar un piso, pero sí podemos pedir una hipoteca a 30 años e ir pagándolo poco a poco. El proceso de ahorro es el mismo pero al menos ya tenemos nuestro hogar.

Al mismo tiempo, también se considera que los mejores créditos se solicitan para comprar activos productos, es decir, aquellos de los que puedas sacar rendimiento más adelante. Invertir en tu formación, en mejorar tu equipación profesional o en emprender un proyecto son activos productivos que te permitirán devolver el dinero junto con los intereses y seguir generando ganancias.

Por otro lado, hay circunstancias en las que es contraproducente pedir dinero prestado. Te recomendamos encarecidamente que no pidas un crédito en los siguientes casos:

Antes de pedir un crédito bancario

Una vez que hayas decidido que te merece la pena solicitar un préstamo bancario, es necesario que seas consciente de la viabilidad del préstamo. En general, se recomienda que el pago de las cuotas no supere el 20% de tus ingresos. Si asumir los pagos de tu préstamo supera un cuarto de tus ingresos, es mejor que no lo pidas porque comenzarás a tener problemas para continuar con tu estilo de vida y hacer frente a los pagos fijos de alquiler, facturas, comidas, transporte, ocio, etc y seguir ahorrando para imprevistos. En su lugar, intenta ganar un dinero extra o pedir un aumento salarial antes de pedir el crédito. Piensa que si ya tienes un crédito es más difícil que te den un crédito si te surge un imprevisto.

Consejos para pedir un préstamo

Sigue estos consejos y, además de gestionar saludablemente tu economía personal, evitarás que un crédito suponga para ti pan para hoy y hambre para mañana.

Y una vez más, piensa si necesitas de verdad un crédito. Si algún familiar te puede dejar dinero posiblemente sea mejor opción. Si puedes esperar a ahorrar el dinero también es mejor opción. Piensa que comprar algo con un crédito sale más caro que comprar al contado. También te recomendamos que si pides un crédito hagas una prioridad devolverlo, p.ej. en una hipoteca es aconsejable hacer amortizaciones anticipadas, sobre todo al principio, reduciendo el plazo y no la cuota.